
23 Abr De la sexualidad a la sexuación
"La organización genital infantil” (1923)
Llegamos finalmente a este texto, que les venía anunciando desde el principio de curso, porque es aquel en el que Freud introduce el cambio en el modo de pensar la sexualidad, por el que plantea una primera organización sexual pulsional, a la que seguiremos llamando sexualidad para distinguirla del sexo instintivo de los animales, y otra posterior, sometida a la primacía del falo, a la que llamaremos sexuación .
Como hemos visto, Freud escribe los “Tres ensayos…” en 1905 y en cada reedición añade no sólo notas sino párrafos enteros a medida que va ampliando su comprensión de la vida sexual humana.
Sobre todo son importantes los añadidos de 1915, que incluyen la elaboración que surge como consecuencia de la “Introducción del narcisismo”. El descubrimiento del yo como objeto erótico implica un cambio en la teoría pulsional, y un replanteamiento de la sexualidad.
La teoría sobre la pulsión sigue siendo hasta el final de su obra una teorización hecha de fragmentos, un colaje la llama Lacan:
- Por un lado, la primera teoría de las pulsiones: pulsiones de autoconservación/ pulsiones sexuales, se convierte en p. narcisistas/ p. objetales, siendo ambas sexuales. En esta dialéctica el objeto es el yo o el otro, respectivamente .
- Por otro, los cuatro componentes de la pulsión –fuente, objeto, fuerza y meta-, cuyos objetos son esos pedazos separables del cuerpo .
- Y finalmente la constitución de la pulsión, a través del lenguaje , con todo el proceso que hemos visto. Este es el punto en el que Lacan insertará la diferencia entre las pulsiones que dependen de la demanda y las que dependen del deseo, pero siempre por la mediación del Otro del lenguaje.
En 1923 Freud escribe este texto, que dice que es un añadido a la teoría sexual, y que s in embargo no intercala en los “Tres ensayos…” , a pesar de que habrá una nueva edición de ellos en 1924 , donde sigue introduciendo nuevas elaboraciones.
Está claro que Freud considera que es una intervención sobre la teoría sexual, pero que la propone como una reflexión distinta , que merece ser un texto aparte .
Freud empieza diciendo que en este texto debe subsanar un descuido que ha cometido en el campo del desarrollo sexual infantil.
Cuenta que al principio creyó que la sexualidad infantil era muy diferente de la de los adultos, poniendo en primer plano las organizaciones pulsionales y el desarrollo sexual en dos tiempos.
Recuerden que para Freud esos dos tiempos eran, al inicio: la infancia y la adolescencia, y que será a partir de la conceptualización del Edipo cuando los adelante: el primero a la etapa pregenital y el segundo al tiempo de la primacía del falo.
Freud descubre, hacia el final de la primera década del siglo, la importancia que tiene la curiosidad sexual infantil, que de entrada adjudica a la aparición de un hermano, y luego al interés por la diferencia de los sexos. En ese momento se da cuenta de que ya en la niñez se consuma una elección de objeto como la del adulto, que hasta entonces creía que aparecía con la pubertad. Lo que no había descubierto todavía era el falo.
Desde luego este no es un objeto pulsional, pero tampoco habla de deseo sino de amor respecto a ese objeto.
Hay en Freud una teoría del amor, cuya dicotomía: amor narcisista / amor objetal es como en las pulsiones, pero que, sin embargo, es otra cosa. El amor está articulado a la demanda, por tanto es más cercano a las pulsiones que al deseo. Es un tema que tendremos que desarrollar en algún momento .
Lacan desarrollará la teoría del amor en diversos seminarios, pero resumidamente podemos decir que el amor es planteado como narcisista o como una metáfora, y, por otro lado, como algo que pondrá en relación deseo y goce .
La importancia de “La organización genital infantil” es que Freud corrige lo que había planteado de que las pulsiones parciales se subordinan en la etapa genital al primado de los genitales para decir que se subordinan al falo.
Recuerda que ya en Juanito habíamos visto que el niño suponía que todos los seres vivos tendrían un genital como el de él, y que el descubrimiento de su falta en la hermana habría sido traumática. En este año añade una nota sobre el complejo de castración en esta historia clínica; de modo, que si no leemos con cuidado parece un concepto presente ya en 1910 .
La novedad ahora es que Freud descubre la fantasía del falo en todos los niños varones, que, cuando ven la diferencia, tienen una primera reacción tendente negar lo que han visto.
Ese negar lo que han visto es la Verleugnung, el mecanismo de renegación de la castración que postula como mecanismo básico de las perversiones.
Introduzco un paréntesis para señalar :
- Por un lado, que hay que distinguir la negación (Verneinung) de la renegación. La negación implica la posibilidad de decir cosas falsas sin mentir, y por tanto aporta una enorme riqueza al lenguaje; además de la mayor complejidad de la negación en el Inconsciente.
- Por otro, que las neurosis y las perversiones son consecuencia de la simbolización (Bejahung) de la falta, que luego los primeros reprimen (Verdrängung) y los segundos reniegan (Verleugnung).
En las psicosis, en cambio, esa simbolización no se produce, eso es la forclusión (Verwerfung).
Freud decía que la primera reacción del niño ante la falta de pene en algunos niños es un momento de renegación; a continuación, si el niño la supera, empieza a inquietarse por su miembro: “ a esos que no lo tienen ¿se lo habrán cortado porque se tocaba como yo? ” Puesto que el niño percibe que eso no se hace , porque no ve que nadie lo haga.
Es el complejo de castración , la fantasía de amenaza de castración .
De entrada el niño entiende que sólo niños despreciables carecen de su amado apéndice (objeto narcisista), y el complejo de castración sólo será realmente eficaz en un tercer momento, cuando descubra la castración materna, puesto que sólo en ese momento la castración es estructural .
Freud deduce que los objetos pulsionales separables también habrán sido vividos como pérdidas, que serán resignificadas por el falo.
Desde luego hay también resignificaciones entre las distintas pulsiones; las encontramos presentes en el lenguaje con sólo que no las desoigamos, por ejemplo: comer con los ojos.
A partir de la conceptualización del falo, Freud distingue dos organizaciones sexuales:
- La primera, organizada a partir de las pulsiones parciales, en la que la diferencia sexual no juega papel alguno .
A pesar de toda la fragmentación y complejidad de la teoría pulsional, lo que está claro es que las pulsiones dependen del lenguaje y que hay cuatro objetos pulsionales .
- La segunda, bajo el primado del falo, en la que no cabe hablar de masculino y femenino, puesto que el genital femenino permanece ignorado, sino que sería fálico y castrado.
Aquí Freud habla de aspiraciones sexuales (Sexaultrebungen) respecto al objeto; evidentemente no se trata de pulsión pero sigue sin aparecer la necesidad de un concepto para esas aspiraciones .
En este punto Freud empieza a preguntarse qué es una mujer, ya que tiene claro que el recorrido de la niña tiene que ser diferente y aún no sabe cómo es; por eso tarda en publicar los textos sobre el complejo de Edipo, y en ellos trata más del complejo de Edipo femenino que del masculino , que ya había quedado claro.
Angeles Moltó